lunes, 11 de junio de 2012

Conceptos olvidados


En la moda, como en casi todo, nos movemos por ciclos que siguen movimientos pendulares, así, el largo de las faldas pasa desde los talones a lo más alto del muslo, lo mismo ocurre con el ancho del pantalón, que hemos visto crecer hasta la incomodidad para facilitar la marcha o adelgazar hasta tener que embutirse en ellos dando saltitos. Así, de un extremo del ciclo al otro, casi olvidamos el camino que hemos recorrido.

Tantos años hemos hablado de inmigración e inmigrantes que casi hemos olvidado que nosotros también fuimos, en nuestro caso emigrantes, un fenómeno que siempre se produce cuando la sociedad en la que vives no puede mantenerte adecuadamente y en condiciones de dignidad, por lo que tenemos que cambiar distancia, desarraigo y extrañamiento por dinero. Claro, que el caso que ahora nos ocupa no es el mismo que el sufrido en España en los años 50, 60 y 70, pues entonces se veían en el NODO caras demacradas, maletas de cartón atadas con cuerda y ojos llenos de esperanza por encontrar en Alemania, Francia o Suiza, aquello que su país no podía darles.

Actualmente, aunque el hambre no nos atenace, los motivos son los mismos pero distintos sus protagonistas, no son obreros sin cualificación y las maletas ya no son de cartón ni van llenas de legumbres, embutidos y tocino. Son troller y van llenos de títulos universitarios, master, post-grados y buenos expedientes académicos que la sociedad española no puede mantener en niveles de dignidad y después de haber invertido en ello durante más de una década, no puede dedicar nada en I+D, por lo que nuevamente capitalizarán su valía Alemania, Francia etc. Y nuevamente en la Europa de dos velocidades, los más débiles contribuiremos al bienestar y al desarrollo de los más poderosos. Y nosotros, que creíamos que habían cambiado tanto las cosas … …

El artículo optimista lo dejo para cuando la ocasión lo merezca.


Un saludo a todos.